31 de enero de 2010

Otro español en la Premier


Nos estamos acostumbrando a ver, cada día más, a futbolistas españoles en tierras británicas. Allí, tenemos una estrella. Cesc Fábregas es el camino a seguir. Pero no podemos descuidar a los demás. Entre otros, podemos nombrar a Almunia, Cuéllar, Fran Mérida, Reina, Riera, Mikel Arteta, Míchel Salgado... Todos ellos representan a nuestro país en la Premier. Hoy quiero darle la bienvenida al último que se ha subido al tren. Concretamente en el Birmingham de McLeish.

Míchel ha salido al campo en el minuto 64 sustituyendo a Lee Bowyer en el partido que enfrentaba al Birmingham con el Tottenham Hotspur. El resultado era de 0-1 en contra tras el gol de Jermaine Defoe con una asistencia (si podemos llamarla así) de Crouch. El debut ante su afición no le ha podido salir mejor. Desde el momento que ha pisado el césped de St. Andrews, Míchel ha perdido todo el nervio y ha dirigido a su equipo con total tranquilidad.

Junto a Barry Ferguson han movido a los Blues, siempre con internadas por las bandas. Los laterales doblaban y Wilson Palacios ya no daba más de sí. Pase a pase y metro a metro, el español se ha ido haciendo con el centro del campo. Y con la inercia del buen juego que imponía, en el minuto noventa de encuentro, Ridgewell hizo el empate. El fortín de St. Andrews sigue infranqueable para los grandes de la Premier. Sólamente siete goles han recibido en casa. Eso sí, llevan veintidós goles a favor en veintitrés jugados.

El Birmingham sigue con paso firme en el octavo puesto de la Premier. Recién ascendido y sin problemas por el descenso, se prevé una segunda vuelta muy tranquila. Lo mejor de todo, la incorporación de Míchel al equipo. Hoy ha demostrado que puede ser titular. El milagro de McLeish sigue siendo creíble. Y, mejor aún, demostrable.

30 de enero de 2010

Ceder, y así progresar

Entre ser niño y ser futbolista apenas hay un paso. Muchas veces, no hace falta ni ese paso para cumplir los requisitos. Por eso, también vemos niños jugando al fútbol. Al momento nos vendrán los nombres a la cabeza, pero os ayudo un poco. Muniain, Canales o Juanmi en esta temporada. Pero os voy a contar los casos idénticos de la Premier League.

El Arsenal es una máquina de sacar chavales. Chicos que, desde una edad muy temprana, empiezan a contar para Wenger sin importar sus años. Cesc Fábregas es el ejemplo más claro. Actualmente, Ramsey, de 19 años, es un asiduo en el 11 titular. Y así hasta un sinfín de nombres que Arsene Wenger sabe sacar y aprovechar año tras año.


Pero el que de verdad lleva sonando desde hace unos años en la cantera gunner es Jack Wilshere. Ha participado hasta en 7 partidos esta temporada y, como el equipo les quiere formados muy jóvenes, se marchará cedido al Bolton hasta final de temporada. En el Reebok Stadium tendrá seis meses por delante para coger toda la experiencia que necesita. El año que viene, incluso éste, tenemos que seguirle el paso.

Danny Welbeck es otro niño prodigio de Inglaterra. Su club es el Manchester United y, hasta ahora, ha jugado en la Liga de Reservas. Con 18 años debutó en el primer equipo. Ferguson también es un experto a la hora de echar el ojo. Seguro que os sonarán los nombres de Ryan Giggs, Paul Scholes o Gary Neville. Welbeck se va a ir cedido al Preston, de la Segunda División inglesa, para curtirse como futbolista en los campos más duros de Inglaterra.


¿Os acordáis de Giovani Dos Santos? Le fichó el Tottenham Hotspur y, dada la dificultad de acoplarse a la Premier, fue cedido 6 meses en 2009 al Ipswich Town, del Championship. Allí anota cuatro goles en ocho partidos. Esta temporada sigue sin contar para los entrenadores que han pasado y se marcha con Rijkaard (su entrenador en el Barcelona) al Galatasaray turco. Se dice que hay una opción de compra por 7 millones.


Para terminar, vamos a centrarnos en el Manchester City. Si hablamos en cesiones, rápidamente sacaréis el nombre de Robinho. Bien, pero no hablaré de él. Vladimir Weiss, también ha sido cedido. El eslovaco, una de las promesas más firmes de su país, compartirá vestuario hasta final de temporada con el ya mencionado Jack Wilshere. Así pues, en Inglaterra tenemos muchas promesas. Hay más, cierto, pero me he querido centrar en estos equipos y en el nombre de sus jugadores.

29 de enero de 2010

El renacer del Everton

El Everton se encuentra en plena racha ascendente. Desde hace ocho partidos (Premier League), los toffees no conocen la derrota. Durante esos ocho encuentros, se ha jugado contra Tottenham, Chelsea, Manchester City o Arsenal. Ahora están instalados en la novena posición y apuntando hacia la revelación de esta temporada, el Birmingham de Alex McLeish. El equipo se ha entonado, se ha reforzado y ahora son un conjunto sólido muy difícil de batir. Lejos queda el 1-6 de la primera jornada contra el Arsenal.


Al margen de este gran momento, el club ha recibido una mejor noticia. Tras casi un año en el dique seco, Mikel Arteta volvió a los campos en el partido de FA Cup contra el Birmingham. En las islas, y allí en Liverpool, le tienen mucho cariño. Y él siempre responde con su mejor versión. Puede ofrecer la calidad que falta en el fútbol inglés y el orden que un equipo necesita para construirse. Desde sus botas se juega; desde su cabeza se elabora.

David Moyes ha engranado este equipo. Todo está saliendo bien. Con los refuerzos de invierno parece que se ha acertado. Landon Donovan le da un tono distinto, una marcha más y un cable con una conexión de alta velocidad. Ya lo demostró en su debut ante el Arsenal, y hace dos días hizo su primer gol contra el Sunderland. Además, se ha cerrado la cesión del ex-gunner Senderos. El central viene a buscar los minutos que le faltaban en el Arsenal.


Lo mejor de todo es que el equipo en general carbura. Todas las líneas están unidas. Del primero al último están entonados. Heitinga cumple, Neville es incombustible, Fellaini es clave, Leon Osman va de bien a mejor, Pienaar sigue confirmándose, Tim Cahill es oportunista, Bilyaletdinov es la novedad, y Saha el gol. Si a todo esto se le añade un Arteta recuperado, estamos seguros de que el Everton va a seguir en esta línea.

Cuando la carretera pica hacia arriba es donde se la juegan los mejores corredores. Nos queda el final de la etapa y termina en un puerto de categoría especial. El Everton tiene muy buenos escaladores y queda tiempo para remontar. Llevan tiempo perdido en la general, pero todo se decide en esta ascensión. Pueden ser, y tiene mucha pinta, el equipo de esta segunda mitad de Premier League.

28 de enero de 2010

El contraste de un buen partido


A pesar de ver el mismo resultado que en Le Molineux, ayer disfrutamos de un gran partido de Premier entre Aston Villa y Arsenal. Aunque en el fútbol solo prime el resultado y los goles, al aficionado le gusta ver partidos donde hay alternativas, ocasiones y jugadas que le dan el toque artístico a este deporte. Por estas circunstancias, ayer el espectador pudo quedar satisfecho.

Cuando un equipo da todo por la victoria no se le puede pedir nada más. Y aunque el resultado sea sin goles, tampoco. Las alternativas eran constantes y no había centro del campo. Se pasaba de un área a otra en escasos segundos y todo era tensión. Se respiraba ambiente. Ver a la grada del Villa Park levantándose cada vez que Ashley Young entraba por banda te emocionaba a ti también. Un robo de Petrov se asemejaba con el lanzamiento de un córner de Stewart Downing o una carrera de Agbonlahor.

Cesc Fábregas llevaba el timón del Arsenal. Todas las jugadas pasaban por él. A partir de ahí, se decidía si buscar a Arshavin, tocar con Rosicky o Ramsey, o intentarlo con un Eduardo un tanto desafortunado. El incombustible Campbell (algún día hablaremos de su vuelta) saltó al campo tras la lesión de Vermaelen y se salió. La jugada de Cesc Fábregas en el último minuto de la primera parte merece mención. No se si lo habréis visto o no, pero regatear sin tocar el balón es cosa de magos.

Los villanos y los gunners se midieron en uno de los partidos de la jornada. Los de Wenger en la lucha por el título, mientras que el equipo de Martin O'Neill intenta asaltar la última posición que da acceso a la Champions League. El empate deja el vaso medio vacío. Lo que nadie va a dudar es que ambos conjuntos se dejaron todo en el intento. Al Arsenal le viene un mes de traca. El domingo Manchester United, la semana siguiente el Chelsea y, después, tendrán al Liverpool junto con el partido de Champions en Oporto.

27 de enero de 2010

Ni vence ni convence

Nada por aquí. Nada por allí. En ningún lado, en ninguna esquina. Las ideas y la imaginación no son amigas. Sin embargo, la imprecisión y la mediocridad se han hecho corrientes. Ya no extraña caerse una vez, y menos aún tropezar varias veces en el mismo escalón. Ahora se vive en una constate irregularidad. Te levantas con moral y te acuestas hundido. Se buscan motivos para enderezarse, pero sólo te encuentras con constantes curvas.

Las cosas se intentan arreglar con resultados. Puede valer mientras éstos sean positivos, pero se vuelven en tu contra cuando la cuenta se hace de uno en uno, en el mejor de los casos. La guerra se gana venciendo muchas batallas. Si ganas una y pierdes las demás, no has conseguido nada. Ya no preocupa la medianía sino la falta de recursos. La falta de combinación, la pérdida de una seña de identidad, es un hecho evidente. En el horizonte se ve un futuro nublado. Hay días soleados, pero vivimos con constantes tormentas.


Cuando se decepciona y se falla en un objetivo se lucha por conseguir otro. Si vuelves a fallar, te agarras a otro posible. Así se llega hasta el último y único objetivo de la Premier League. Error tras error y decepción tras decepción. No corren buenos tiempos en Liverpool. El empate contra los Wolves sin goles deja un lastre muy pesado. Los puestos europeos vuelven a ponerse dos puntos más caros. Falta de todo y no falta de nada.

Faltan demasiadas cosas. Todas han sido analizadas pero se sigue cayendo en los mismos errores. Errores que han sido traducidos a defectos. Lo casual se ha vuelto corriente. El equipo titular no queda claro. No hay once jugadores que se tengan que jugar los momentos importantes. También es cierto que no se ha podido por el tema de lesiones. Demasiadas lagunas y pocos recambios de nivel.

Paradojas de la vida, no falta de nada. El Liverpool tiene un once titular temible. Tiene todo lo que cualquier equipo grande necesita. Pero si quitas a uno, se evidencian las carencias. Reina, Mascherano, Aquilani, Gerrard, Kuyt y Torres. Jugadores de primer nivel mundial. Los recambios, algunos ni los conozco. No faltan nombres pero se echa de menos el juego. No falta historia pero se echa de menos el presente.

26 de enero de 2010

Premier is Coming Back

La Premier vuelve a la rutina esta noche. Se hace muy raro pasar una semana sin partidos de la mejor liga del mundo. Cuando el fútbol mundial descansa, son los ingleses los que nos regalan partidos. Durante el fin de semana fue la FA Cup la que se llevó el protagonismo en las islas, pero hoy vuelven los partidos de liga. La Premier League arde por todos sus extremos, tanto por arriba como por abajo.

En Fratton Park, a las 20.45, se verán las caras dos equipos que luchan por el descenso. El Pompey de Avram Grant intentará agarrarse a la salvación a manos del West Ham de Gianfranco Zola, que siempre coquetea con los puestos calientes. Les separan cinco puntos y cinco puestos. Con eso queda dicho la importancia de este partido.


El Wolverhampton se enfrenta al Liverpool a la misma hora. Los Wolves intentan salir de la zona baja de la tabla (mismos puntos que el descenso) mientras que el equipo de Rafa Benítez viene con una inyección de moral tras superar a los Spurs en el partido pasado. Una victoria de los reds les colocaría con el punto de mira en los puestos Champions.

En la tanda de las 21.00 se juegan dos partidos. Bolton – Burnley y Tottenham – Fulham. En el Reebok Stadium, los Trotters se la juegan ante un rival directo en la lucha por la permanencia mientras que en The Lane, el equipo de Harry Redknapp intentará mantener la cuarta plaza ante un conjunto, el Fulham, que está situado en la zona tranquila de la clasificación.




PD: Siento mi ausencia continuada a lo largo de este tiempo. Quizá sea el período post-exámenes, desmotivación o, incluso, falta de tiempo, pero ya estoy de vuelta con las pilas recargadas para seguir escribiendo sobre lo que me gusta. Saludos.

22 de enero de 2010

Buena hornada Red Devil

Lo normal y corriente en el mundo del fútbol es hablar de las estrellas, de los grandes jugadores y de los mejores equipos. La actualidad de estos personajes es lo que más vende. Pero hoy quería centrarme en un partido que tuve la oportunidad de ver ayer. Precisamente, ellos no son ni estrellas, ni los mejores jugadores del mundo. Son jugadores y figuras en potencia.

Conocemos la plantilla extensa y técnica que tiene el Manchester United, reconocida a nivel internacional. Lo que no sabemos del todo bien es el funcionamiento de su cantera. Hoy quería comentar el partido que el equipo de Ole Gunnar Solskjaer (sí, el mismo, ahora es entrenador) jugó ayer contra el Sunderland, partido que pertenece a la liga de reservas.


Entiendo que sea un tema que no interese para nada. Lo sé perfectamente. Mi única motivación para estar sentado viendo ese encuentro era el poder observar a los llamados futuros cracks del United. Entre ellos, Mame Diouf (foto), Danny Welbeck o Gabriel Obertan. Ellos ya han debutado con el primer equipo, pero su puesto real está aquí. Otros jugadores que conoceréis son Kiko Macheda, o Ritchie De Laet, que debutó hace poco en la Premier. Por aquí también pasaron Piqué y Rafael (los más recientes), entre muchísimos otros.

Gabriel Obertan tengo que decir que me recordó a dos jugadores: Cristiano Ronaldo y Robinho. Del portugués, su habilidad con el balón y su velocidad; del brasileño, su egocentrismo y necesidad de destacar. Danny Welbeck es el más joven de los trés. Con el número 10, es un delantero espigado y muy rápido. Ayer no culminó su partido con gol, pero pudo hacerlo. Mame Diouf debutó hace pocos días con el primer equipo haciendo un gol al Birmingham. Ayer era su primer partido (si no entendí mal) con el equipo reserva. Hat-Trick incluído con un olfato goleador abismal. El primer gol es de una definición perfecta.


El italiano Macheda salió en la segunda parte. El resultado final fue de un 0-4 abrumador y completamente justo. Pero, para terminar, quería nombraros los jugadores que más me llamaron la atención y que no conocía de ese equipo. Os lo dedico a los que ojeáis el panorama internacional para que los tengáis en cuenta. Daré tres nombres: Ben Amos (portero), Matthew James (medio centro) y Corry Evans (medio centro, a mi gusto el mejor, en la foto).

21 de enero de 2010

Así me gusta a mí

Ni antes tan penosos, ni ahora campeones. Precaución, humildad, constancia y trabajo. El Liverpool ganó ayer al Tottenham, rival directo para las plazas europeas, en un partido marcado por las ausencias de los reds. Sin Gerrard, Torres, Benayoun o Agger el equipo de Rafa Benítez mostró una de sus mejores versiones. Y lo mejor de todo, se la regaló a su público. Se han colocado a un solo punto de los puestos que tienen la llave europea aunque, eso sí, con un partido más.


Kuyt, Aquilani y Skrtel. Me quedo con esos tres nombres propios ayer. El eslovaco Skrtel por demostrar, una vez más, que no hay que dudar ni un solo instante de su titularidad. La evolución que ha tenido es fabulosa y se ha ganado el puesto. Por fín pudimos ver a Aquilani jugando ochenta minutos. El italiano aporta cosas distintas, algo de inventiva, cosa que solo Benayoun sabe dar. Algo impreciso en algunas acciones, se nota que piensa más rápido que los demás. Tiene algo. Para hablar de Kuyt me faltarían palabras. Ayer, dos goles para su equipo. No es el mejor, ni el más rápido, ni el más goleador, ni el que más puntería tiene. Pero es indiscutible y esencial.

En el otro partido del día, el Arsenal hizo una remontada de campeón para colocarse en el primer lugar de la Premier League. Estos son los puntos que, a la larga, se echan de menos si quieres luchar por el título. Pero no fue así, y lo consiguieron a lo grande. La magia que tiene la mano de Wenger sigue siendo competitiva. Un equipo donde los veteranos son Almunia y Gallas, y los demás apenas llegan a los 25 años (salvo Rosicky cuando juega) tiene muchísimo mérito.


Klasnic, Arshavin y Cesc. Con 0-2 en el marcador para el Bolton, se preveía un pinchazo de los gunners. Incomprensiblemente, el croata Ivan Klasnic era suplente. El hombre con más gol del equipo se quedó en el banco. Al final, salió 15 minutos aproximadamente. El resultado fue 4-2. Qué bueno es el ruso Arshavin. Es diferente a todo lo demás. Tiene una velocidad y un regate en corto descarado. Ayer firmó un gol de luchador. Tras tres rechaces, consiguió dejar el balón bajo la red. Pero el equipo gira en torno a Cesc Fábregas. Nuevo gol del catalán y nuevo partidazo. Y van muchos. Todo lo que pueda decir de él, ya ha sido dicho.

La Premier League continúa y, con los partidos de ayer, todo se aprieta un poco más. Por arriba el Arsenal se confirma como claro candidato al título mientras que el Liverpool se intenta colar en la lucha por la Champions. Así es como nos gusta esta liga, con muchos equipos y pocas posiciones.

20 de enero de 2010

La venganza de Carlitos

El Ciudad de Manchester presenció, en la noche de ayer, el partido de ida de la primera semifinal de la Carling Cup. Mucho fútbol, tensión y un morbo añadido por la presencia de Carlos Tévez en el City contra su ex equipo. Ninguneado en el United y sin el protagonismo que buscaba, El Apache buscó su marcha. Los petrodólares le llevaron al City donde se estaba preparando un equipo a golpe de talonario. Los más de doscientos cincuenta millones gastados en jugadores no dejan indiferente a nadie.


Allí es el rey. Es el jugador más importante de su equipo. Posiblemente, el futbolista más en forma de Europa a día de hoy. Sus dos goles ayer así lo afirman. El United no supo parar a un antiguo compañero y éste no perdonó en ningún momento. Por arriba y por abajo, Tévez volvió loca a la defensa de los red devils. Queda una vuelta muy complicada en Old Trafford, pero El Apache ha enderezado las cosas desde el primer momento. En El Teatro de los Sueños quiere firmar su mejor obra y quiere llevar a su equipo a lo más alto en la Copa de la Liga de Inglaterra.

A pesar de todo, el City no jugó su mejor partido. Con las ausencias de Adebayor, Ireland, Touré y Lescott entre otros, tuvo que formar una defensa de circustancias. El chaval Dedryck Boyata y Kompany fueron la pareja de centrales mientras que Micah Richards y Javier Garrido ocuparon las bandas. Mención especial para éste último, que realizó un muy buen partido en defensa y se sumó al ataque cuando debía. En el centro del campo, Barry se quedó sin su pareja de baile y era la referencia en todas las jugadas. La dirección, el volante del equipo. Zabaleta y De Jong fueron sus escuderos. En las bandas se aprovecharon de la velocidad y desborde de Wright-Phillips y el oportunismo de Craig Bellamy. En la delantera, el motor, el rematador, el goleador.


El United controló la primera parte pero tampoco hacía ocasiones claras. Rafael, Brown, Evans (muy buena primera parte con Tévez) y Evra formaban la línea defensiva. Fletcher fue un mero acompañante de Carrick, organizador principal del juego y objetivo de pase de los centrales. A partir de ahí, Valencia y Ryan Giggs disfrutaron del ancho del campo. Anderson por delante y Wayne Rooney en punta. Otro que tal baila. De un remate suyo rechazado en Given salió el primer gol de Giggs. Y de él también suelen salir la mayoría de los goles del United. Es el líder y el mejor.


Con un gol abajo en el marcador, Tévez sacó su furia. Empató el partido al filo del descanso al transformar un penalty un tanto dudoso de Rafael a Bellamy. Que aprendan todos los lanzadores, así no fallarán jamás. Más tarde, en la segunda parte, Tévez culminó su venganza con el segundo de su cuenta al rematar de cabeza un balón muerto en el área. Siempre está ahí, y siempre participa en las ocasiones. Si no las remata, las crea. El United tuvo ocasiones de empatar el partido en los últimos minutos, pero la eliminatoria se decidirá en Old Trafford. En el Teatro, se pueden cumplir los Sueños de Carlos Tévez: Ganar, conseguir la venganza y demostrar que fue un error grave dejarle marchar.

16 de enero de 2010

Al Liverpool le falta, al Chelsea le sobra.

Estoy hablando de lo más importante del fútbol. Estoy hablando de lo necesario para ganar partidos, para culminar las victorias. Estoy hablando, también, del grito que une a todos los aficionados por un mismo equipo. Estoy hablando del gol. Eso mismo que el Liverpool echa de menos y que el Chelsea, como ha demostrado hoy, fabrica de todos los colores y para todos los gustos.


El Liverpool, parece aburrido contar siempre la misma historia, ha vuelto a fallar. Y lo ha hecho de la misma manera que el miércoles pasado. En el minuto noventa, Huth ha hecho el gol del empate para el Stoke City. Kyrgiakos, titular en el día de hoy como pareja de Skrtel, hizo el gol de los Reds. Pero voy al tema de hoy. Sin Fernando Torres, este equipo no es el Liverpool que yo conozco. Aunque, desgraciadamente, poco a poco me empiezo a acostumbrar a este juego y a esta poca tensión. Lo raro se me está haciendo habitual, y lo bueno cada vez lo echo más de menos.

No hay peligro y, lo que es peor aún, no hay ocasiones. Ya me han dejado de preocupar los resultados, me preocupan las pocas soluciones que encuentro. Si sólo me motivaba Aquilani, hoy Benítez decide sacarlo a tres minutos del final. Olé, así es como se tiene que adaptar a un jugador. N'Gog no ha visto un balón en todo el partido, un jugador como Degen tiene que ser titular, Maxi sale en la segunda parte y no la ha tocado. Solo Kuyt se salva de la quema, como casi siempre. Bueno, y Skrtel, que yo no se como todavía no es titular indiscutible.


En el lado opuesto del fútbol se encuentra el Chelsea, que hoy ha bailado a su gusto a un Sunderland muy inocente. Uno, dos, tres y así hasta siete veces ha entrado la pelota en la portería rival. Anelka (partidazo y jugadorazo) y Lampard en dos ocasiones y Malouda, Ashley Cole y Michael Ballack en una han dado toda una exhibición. Siete a dos fue el resultado. A base de goles que, al fin y al cabo, es lo que te lleva a las victorias. Lo mismo que le falta a los reds, cada día más y más lejos de los puestos de cabeza.

Si hay algo que todavía puede salir peor, no dudamos de que va a salir. También ha ganado el Manchester al Burnley tres a cero en Old Trafford, el Tottenham ha empatado a cero contra el Hull City en White Hard Line mientras que el Arsenal, con la vuelta casi segura de Cesc, juega mañana contra el Bolton. Uno ya no sabe en qué cogerse para tener motivación. Pero esto es fútbol, y todos tenemos que disfrutar de ello.

15 de enero de 2010

Dawid Janczyk, el ariete polaco

No me veréis hacerlo normalmente, pero hoy quiero hablaros sobre un joven polaco. Un chico que me encandiló en el Mundial Sub 20 de Canadá y que, desde entonces, le he estado siguiendo. No es conocido, y posiblemente no lo llegue a ser a nivel mundial. Pero tiene una chispa que me gusta, y la fuerza y contundencia que un delantero necesita. Dawid Janczyk (1987) era la estrella de su selección para aquel Mundial. Venía de enloquecer a su país, un año anterior en el Europeo haciendo un Hat-Trick contra Bélgica. (Os dejo el mejor de los tres)


En aquella ocasión, no tuvieron suerte y quedaron eliminados en la fase previa. Pero Dawid ya había dejado su sello de calidad con dieciocho años. En el Legia de Varsovia siguió haciendo las cosas bien, y ahí llegó una nueva oportunidad para él. Mundial Sub 20 de Canadá y Polonia queda encuadrada en un grupo con la EEUU de Adu y Altidore y Brasil de Pato, Leandro Lima o Jô. En el partido inaugural, vencieron a la canarinha con un golazo de falta de Krychowiak (Stade Reims) y pasaron, contra todo pronóstico, a los octavos de final. Allí se encontraron con la selección que, a la postre, sería la vencedora. Agüero, Di María y Zárate lideraban esa generación. Dawid Janczyk, con dos goles en la fase de grupos y uno en los octavos, llamó la atención del CSKA de Moscú.

Se convirtió en el traspaso más caro de su país con 3'5 millones. Debutó en Champions contra el Inter de Milán y fue con la selección de Leo Beenhakker. Fue uno de los jugadores de la preelección para la Eurocopa 2008 pero se quedó fuera. No ha tenido el tiempo necesario para demostrar su valía en el equipo ruso, quizá por la grandísima generación que hay en él. Dawid Janczyk se ve obligado a buscar una salida en forma de cesión en enero de 2009.



Desde esa fecha hasta hace pocos días, Janczyk ha estado defendiendo los colores del KSC Lokeren, equipo belga que lucha por el descenso. Allí ha tenido lo que un jugador necesita, oportunidades. Y los minutos los ha convertido en goles. Catorce en treinta y un partidos. Su cesión terminó en el diciembre pasado, pero lejos de tener confianza, Dawid se vuelve a marchar cedido a un equipo belga. Esta vez, el K.F.C. Germinal Beerschot, cuarto en la categoría y que tiene aspiraciones de entrar en la UEFA. Este equipo, por desconocido que parezca, ha formado a jugadores como Thomas Vermaelen, Jan Verthongen, Aaron Mokoena (Portsmouth) o Toby Alderweireld. Como veréis, cantera del Ajax pura y dura.

Dawid Janczyk no ha tenido oportunidades en Rusia, y se las ha buscado fuera. Quizá Bélgica no sea un país importante (Anderlech, Brujas o Standard como equipos destacados) pero lo que sí sabemos es la capacidad de cantera que hay en él. Deseo que Dawid triunfe allí y llame la atención de un equipo mayor, porque estoy seguro de que es y será un jugador muy aprovechable. Fuerza innata, olfato goleador y rematador de todo lo que llegue. Quizá algo falto de técnica que lo suple con instinto y oportunismo. Así es Dawid Janczyk, el ariete polaco.

14 de enero de 2010

¿Y ahora qué?

Nuevo fracaso. Y ya es el enésimo del Liverpool. Ayer por la noche quedó apeado de la FA Cup jugando el partido de Replay en Anfield contra el Reading. Ni siquiera en el templo del fútbol, su propio estadio, se estimula a un equipo que busca un punto de inflexión. Fuera de Champions, lejos en la Premier y eliminados de la FA Cup, ahora solo queda el objetivo de la Europa League y de luchar por un puesto digno en liga que te devuelva a Europa al año siguiente.


Todo el mundo sabe que algo falla. Pero nadie sabe a ciencia exacta qué es eso. Como suele pasar, en el fútbol el primer culpable es el entrenador. Por eso, Rafa Benítez es más que discutido. Su logro de conseguir la Champions el primer año ya queda lejos y ahora se quieren títulos, no basta con vivir del recuerdo. Se critica también su política de fichajes. Me encantaría que un solo seguidor del Liverpool me confesara que le ilusiona muchísimo el fichaje de Maxi. Dudo que ese sea el camino, pero si es el que han escogido, a los seguidores no nos queda mayor pena que seguirles. La falta de un jugador que haga salir el balón con claridad es, quizá, lo más necesario. O, como otra opción, un extremo en condiciones.


También se dice que los culpables son los jugadores. Además, la mala suerte se ha cebado con Fernando Torres y ayer volvió a caer lesionado, al igual que Steven Gerrard. En cuanto en el equipo falta El Niño, ya no son los mismos y si falta su capitán, desacertado esta temporada, no se acercan ni a la sombra de lo que pueden ser. A parte de estos dos jugadores, hay poco que ilusione a la grada. No hay jóvenes promesas que te motiven y que pongan un tono de vitalidad nuevo en el equipo. Insúa o N'Gog (por dar ejemplos) pueden ser jóvenes, pueden ser buenos, pero no lo suficiente para un Liverpool que debe aspirar siempre a lo máximo.

El momento es crítico. Lo saben allí y en todos sitios. Hace falta una reacción para levantar al equipo. Un objetivo factible que suba los ánimos de esa plantilla hundida. En esta situación es cuando se verá la grandeza del club y ahora, más que nunca, los aficionados no dejarán solos a los reds. El camino de la victoria es duro y, por eso, cantarán You'll never walk alone.

13 de enero de 2010

El milagro de McLeish

Lo que parecía una sorpresa de principio de temporada, se está convirtiendo en una realidad. La increíble racha de 12 partidos sin perder les ha colocado octavos con los mismos puntos que el Liverpool de Rafa Benítez. Y es que el Birmingham City es la mayor revelación de este año en la Premier League. Me recuerda a Contador escalando al lado de Bradley Wiggins en el último Tour de Francia. Alguien con quien no cuentas pero que está ahí. Así son los Blues contra equipos como el Manchester City, Liverpool o Aston Villa.


El equipo de Alex McLeish basa su fútbol en una defensa contundente muy poco permisiva y un ataque que aprovecha las ocasiones. Los Blues son uno de los equipos menos goleados pero que han hecho de St Andrews un fortín donde sólo han recibido cinco goles en diez partidos. Por otro lado, sus números goleadores son muy deficientes llevando una media de gol por partido. O lo que es lo mismo, veintiuno en veintiún partidos.

La delantera ha sido uno de los quebraderos de cabeza de McLeish pero el tiempo ha puesto a cada uno en su lugar. Cameron Jérome y Chucho Benitez suelen ser la pareja titular. Con Joe Hart en la portería, la defensa está formada por dos fichajes de The Championship y otros dos de la talla de Scott Dann y Ridgewell. Dureza y seriedad. Su equipo se forma a partir de esta línea. Si ellos funcionan, el Birmingham puntúa. En el centro del campo suelen jugar Barry Ferguson y Lee Bowyer junto con McFadden por la izquierda y el sueco Sebastian Larsson por la derecha.


Su situación en liga, como ya hemos dicho, es envidiable para un equipo como el que tienen. Demasiado conservadores en muchos momentos y astutos a la hora de aguantar el resultado. El empate sirve. En la FA Cup siguen vivos tras derrotar ayer al Nottingham Forest en el replay. ¿Sabéis el resultado? 1-0. Con eso basta. Un partido más sin perder y sin recibir.

De este modo, a golpe de efectividad mala pero optimización máxima, el Birmingham es la revelación de la Premier. Muchos dudan de su capacidad para aguantar en lo alto de la tabla, pero lo que está claro es que se han ahorrado muchos esfuerzos a final de año.

10 de enero de 2010

Cómo disfrutar del fútbol

La nieve suspendió cinco de los siete partidos de la Premier League que nos esperaban en la tarde del sábado. Afortunadamente, nos regaló dos. Con mal tiempo y mucho frío, eso sí, pero se jugaron. Inglaterra tiene algo especial en su fútbol. Algo que nos engancha desde el primer minuto de partido y que nos hace vibrar y sufrir hasta el último momento como si fuéramos el seguidor más fiel. Ellos poseen la esencia de este deporte y la saben transmitir.


En el Emirates se vieron las caras el Arsenal, con el objetivo de alcanzar al Chelsea en el mes de enero, y el Everton, con intención de alejarse definitivamente del descenso. Leon Osman hizo el primero para los Toffes al poco de empezar el partido. Sin Cesc pero con Nasri, el conjunto de Wenger, sin un juego llamativo, consiguió empatar gracias a un lanzamiento de Denilson desde la frontal del área que desvió un defensa. El descanso llegó y la nieve hizo lo propio.

El Everton, muy bien plantado en defensa, salía al contraataque gracias a la velocidad de Donovan (excelente partido como debutante), Saha y la técnica de Tim Cahill. Mientras tanto, los Gunners se la jugaban sin demasiadas ideas y se chocaban contra Fellaini en el medio del campo. En una de las contras avisadas, con un pase magistral de Cahill, Piennar resolvió a la perfección con una media vaselina.


En la Premier, diez minutos son un mundo. Ese es el tiempo que tenía el Arsenal para remontar. Ataque total. Durante diez largas vueltas de reloj, los gunners asediaron el área del Everton hasta que en el minuto 47, Rosicky empaló con el exterior un pase de Diaby. Todavía quedaban cuatro de los seis minutos añadidos y hubo ocasión de la remontada, pero el marcador no se movió más. Terminé de pie y en tensión, con eso os digo todo.

Es muy fácil que te guste el fútbol pero es distinto el disfrutar con ello. Ayer pudimos disfrutar. Tuvimos sensaciones que viendo otros partidos no se tienen. Dos equipos entregados, luchando bajo la nieve y coreados por su hinchada. Así no hay frío que pare las piernas ni calle las bocas. Así es la Premier en estado puro. Más que una pasión. Puro espectáculo.


Más tarde empezaría el partido entre el Birmingham y el Manchester United. El equipo revelación contra el aspirante al título. La contundencia defensiva contra la efectividad y el ataque. Los red devils intentaron abrir el campo con Evra y Rafael como carrileros, además de Valencia y Park por delante. El juego no era vistoso por ninguno de los dos lados, y fue en un rechace a balón parado donde Jerome hacía saltar las alarmas.

Rooney era un islote entre Dann y Johnson, pero un islote que sacaba jugadas. Wayne es un jugador excepcional. Ayer lo volvió a demostrar. Mediada la segunda parte, un balón quedó muerto al borde del área, Evra disparó y se cruzaron tanto Fletcher como Dann, y este último introdujo el balón en su portería. Así terminó el partido, empate a uno y el Birmingham contento pero sabiendo que, de no ser por Kuszczak, se habría llevado la victoria. El Manchester tiene un buen recambio para Van Der Sar. El Chelsea puede coger de nuevo ventaja después de estos dos tropiezos. Pero la emoción no nos la quitará nada ni nadie.

Gracias Premier por darnos tardes así.

9 de enero de 2010

Vuestros enlaces

Hoy es una entrada algo anormal, lo se. El asunto es que he perdido absolutamente todos vuestros enlaces de los blogs (como veréis, no tengo ninguna lista de blogs) por lo que os pediría que me los fuerais dejando en un comentario. De este modo, también aprovecharé el día de hoy para darle el cambio de look definitivo. Un saludo y muchas gracias.

8 de enero de 2010

Sobre la actualidad Red

Ocupando el séptimo lugar en la Premier League y a doce puntos del Chelsea, el Liverpool está pasando una temporada irregular marcada por sus constantes decepciones. Dos ejemplos de ello, la eliminación de la Champions League en la fase de grupos o la necesidad de un Replay contra el Reading en la FA Cup. El equipo de Anfield busca ahora caras nuevas en el mercado de invierno para afrontar la segunda mitad de la temporada. Entre las lesiones constantes y el bajo rendimiento de algunos jugadores, se buscan nuevos refuerzos para afianzar posiciones.


Maxi, fichaje inminente.
Maxi Rodríguez es el primer nombre propio a tener en cuenta. El argentino, sin el apoyo de Quique Sánchez Flores y con el Mundial a la vista, está a punto de firmar con el equipo red a cambio de 1'5 millones de euros. El contrato se cerraría por esta temporada y la siguiente además de bajar los cinco millones que tiene como sueldo. Personalmente, no es un jugador que me atraiga como refuerzo y no me parece lo correcto y necesario. Su juego exterior llevaría a Kuyt a la otra banda o le colocaría de pareja con Torres, lugar del que nunca tendría que haber salido. Ahí es donde el holandés se convierte en un goleador nato.

Con este fichaje casi cerrado, suenan otros nombres como Carlton Cole o Ruud Van Nistelrooy, carentes aún de credibilidad y que se quedan como simples rumores. Fernando Torres está volviendo tras su lesión y David N'Gog se está adaptando al equipo gracias a las numerosas oportunidades que está teniendo. El conjunto red no necesita un delantero, sino un jugador que le haga llegar los balones. Gerrard no está pasando su mejor temporada y Torres se fabrica los goles solito. Otros nombres en la agenda son Arda Turán, Vasilis Torosidis o Iván González, canterano del Málaga.


Dossena, el primero en salir pero no el último.
En el lado de las salidas tenemos que hablar de tres nombres propios: Andrei Voronin, Ryan Babel y Andrea Dossena. Éste último ya ha sido traspasado por una cantidad cercana a los 5 millones de euros al Nápoles. No se llega a los siete que se pagaron por él, pero se recupera un dinero por un jugador inutilizado. Se busca una salida también a Voronin para intentar pasar a la ofensiva hacia algún fichaje.

El caso de Ryan Babel es el más dudoso. Jugador de enorme calidad que no cuenta con demasiados minutos se ve obligado, en contra de sus intenciones, a buscar una salida para conseguir una plaza en el Mundial. El Liverpool ya ha rechazado 9 millones del Birmingham. Ahora, días después de la oferta, lo ha replanteado y le parece una gran idea. Sería un refuerzo de muchísima calidad. No comprendo la poca importancia que se le da a este jugador. Puede ser muy incisivo y determinante jugando como extremo.


Lesiones y adaptación de Aquilani.
Por último, tenemos que tener en cuenta las lesiones importantes que han ido sufriendo algunos jugadores. Con Fernando Torres todavía recuperándose, Glen Jonshon y Riera han sido los últimos titulares en caer, además de Nabil El Zhar. Todo esto y añadido a la poca importancia que ha tenido la presencia de Aquilani en el campo, hace que se quieran buscar refuerzos. En cuanto el italiano entre en dinámica de titular en pareja junto a Mascherano, será donde veamos todo su potencial.

Nos guste más o menos, esta es la actualidad del Liverpool. Por el bien de nosotros, sus seguidores, que todo sea para llegar a un punto de inflexión donde el juego sea más atractivo y las victorias menos sufridas. Por el bien de Anfield. Os invito a poner vuestro once ideal del Liverpool esta temporada, aquí os dejo el mío: Reina; Glen Jonshon, Agger, Skrtel (Carragher está en sus últimas), Insúa; Mascherano, Aquilani, Gerrard, Riera; Kuyt, Fernando Torres.

6 de enero de 2010

Rememorando... Francia 1998

En Francia, todo estaba alineado para un buen final. Se acogía el Mundial de fútbol en el año 1998 y se tenía una generación de futbolistas excelente. Se mezclaba experiencia, años y veteranía con juventud, proyección y una oportunidad inmensa. Junio y julio estaban a punto de asistir a un evento de repercusión internacional. Un evento que quedará en el recuerdo de muchos. Personalmente, mi primer Mundial con uso de razón.


La fase de grupos fue solventada con total facilidad. Sudáfrica, Arabia Saudí y Dinamarca sucumbieron ante un equipo sólido y con pegada. Henry jugó poco, pero dejó su sello con sus únicos tres goles. David Trezeguet, Lizarazu o los míticos Petit, Djorkaeff y Dugarry fueron los otros goleadores. Un tal Pires, joven todavía, demostraba su valía con la selección en sus minutos. Sin problemas, Francia ya se encontraban en la fase eliminatoria.

El rival que dejó fuera a España, Paraguay, era el rival de los galos en octavos de final. Quizá el partido más difícil o, por lo menos, más dudoso de ellos. Tuvieron que llegar hasta la prórroga para que ese punto de veteranía, hecho realidad en Laurent Blanc, marcara el gol de oro. Su beso en la calva de Barthez le había dado suerte. Esta vez, él fue el heroe.


Italia esperaba en Saint Denis. Un rival duro, muy duro, en cuartos de final. Otra vez se llegó a la prórroga y, además, a la tanda de penaltis. Como decimos, todo estaba alineado para un buen final y la suerte sonrió al gallo. Esta vez, Barthez triunfó y Blanc marcó el último lanzamiento. Un rival menos y el objetivo de la final cada vez más cerca.

La revelación del torneo, Croacia, con Davor Suker a la cabeza se había plantado en las semifinales después de eliminar a Alemania. Saint Denis, otra vez, fue testigo de la tarde más bonita de Liliam Thuram. Sus dos goles dieron la vuelta al tanto inicial de Suker. El central de Francia había metido a su equipo en la final del Mundial. Mejor dicho, en la final de Su Mundial.

Qué mejor colofón que en la final esté Brasil. Y así fue. Era el día señalado, el lugar señalado y el estadio señalado. Saint Denis vería la gloria. Tocaría el cielo con su equipo. Al ritmo de un chico con claros signos de alopecia, Francia brilló. Supo apagar el amarillo de Brasil para ganar contundentemente. El maestro Zidane llevó en volandas a su equipo y Petit cerró el marcador. Tres a cero. Y Francia levantó el trofeo más deseado. En su casa y con los suyos. A los demás también nos hicieron disfrutar. En el recuerdo de los aficionados quedará ese Mundial que vió nacer a una generación fabulosa. Pocos quedan ya en activo, pero siempre recordaremos aquel equipo.