17 de marzo de 2012

Al Hull le gustan los extremos

En algún momento, no importa cuándo, el balón termina llegando a sus pies. Bien pegaditos a la línea de banda y mirando en diagonal hacia la portería. Entonces piensan y encaran a su defensor. Con el interior y el exterior conducen la pelota, retando en duelo a su par con el objetivo de rebasarlo o de encontrar el hueco suficiente para colocar un buen centro al área. En ello basan su ataque. Ambas opciones son válidas ya que la máxima del Hull es generar las ocasiones desde los dos extremos del campo, las posiciones que más explotadas tienen. Para ello han conseguido hacerse con dos futbolistas que se dedican exclusivamente a ello, a producir goles: Cameron Stewart y Robbie Brady.

Cameron Stewart, 1991
Una preocupante falta anotadora ha alejado levemente al Hull City de los puestos de playoff, lugar por el que luchan desde el comienzo de la temporada y al que, si todo sigue su curso, optan a conseguir. El proyecto de Nick Barmby comenzó incluso antes de que tomase posesión del banquillo, puesto que ejerció de jugador-entrenador mientras Nigel Person daba sus últimas órdenes en el equipo. Una base joven, en un sobresaliente ejercicio de cesiones (con el Manchester United como fuente principal), es la denominación propia de esta plantilla que dejó la Premier League hace dos temporadas. Al Hull no le encanta la posesión pero no la rechaza, ya que éste es un buen camino para que el balón llegue a las dos bandas, auténtica seña de identidad de los tigers y motivo principal de estas líneas. Porque la temporada de Brady, en especial, es para etiquetarlo como un extremo de un grandísimo potencial si consigue resolver su leve problema con la regularidad. Ahí va un ejemplo de sus habilidades.

Robbie Brady, 1992
Si los dos extremos son la razón del artículo, el resto del equipo es la excusa, ya que hay un buen puñado de futbolistas a destacar. El primero es James Chester, que a pesar de que su físico (un tanto liviano y 177 cm) ha experimentado una evolución notable durante el curso, con una fabulosa capacidad de anticipación. Tom Cairney o Corry Evans son los que ponen el talento en el centro del campo, siendo el segundo de ellos mucho más habitual. Conocido para muchos es Robert Koren, el que enlaza con el ataque, ya sea desde el mediocentro o la mediapunta, donde baja constantemente a combinar. Cierran la lista el confirmado como goleador Matty Fryatt o los ilusionantes futuros como jugadores ofensivos de Mark Cullen y Joshua King.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

alvaro que me puedes decir de Robbie Brady xq como seguir del Manchester me gustaria saber si lo ves como una opcion el proximo año en la banda izquierda sobre todo en el hecho que el united no tiene ningun extremo zurdo. Lo ves con potencial para luchar un 11 en el united o mas ser un jugador de banca??

@Carlos_Jimenez5 dijo...

Yo sigo al Hull y sí, Brady está siendo una revelación al igual que Stewart (Me decantó más por este, su explosión en la banda me recuerda a los inicios de Walcott) pero es que estaríamos hablando del Manchester United. Impensable. Ojalá entren en los playoffs, pero le falta algo más a este Hull para subir. En el caso de ascender creo que Brady seguiría en la ciudad de Hull por una temporada más.

Álvaro de Grado dijo...

@Anónimo

Yo creo que tiene pocas posibilidades de asentarse en un equipo como el Manchester United. No ha explotado en mega-estrella, simplemente ha destacado bastante en una plantilla de Championship, lo cual no es poco. Ashley Young está ocupando muchas veces la banda izquierda y, sinceramente, no me parece que Brady vaya a mejorar eso. Sí lo veo, en cambio, para ser titular en un equipo medio-bajo, un recién ascendido o, como ahora, un aspirante real al ascenso.

@Carlos Jiménez

Tienes razón que guarda ciertas similitudes. Quizás Stewart es algo más delantero que Brady. Con esto quiero decir que podría utilizársele en esa posición si se requiere, algo que no ocurriría con Brady. Y coincido plenamente en lo que dices del ascenso y de las posibilidades del canterano de quedarse en el equipo. Sería bueno para él, además.